miércoles, 19 de agosto de 2015

27ª Página: La naturaleza efímera del momento



Observo éste frágil, efímero y fugaz momento
Abro los ojos, los abro con mucho esmero
Pues puede que lo que hoy vea
No lo vaya ver nunca más.

Fotografío cada momento en mi mente
Intento inmortalizar firmemente
Algo que concluirá perdiéndose
En el gran desconocido.

La desdicha corre por mis venas
Pues en los momentos felices
Mi espíritu se ennegrece.

Pues solo puedo concebir
El como ese instante se fue
Y no volverá a venir.

En realidad soy afortunada de ser como soy
Ya que cuando me percato finalmente 
de que aquello jamás volverá a ocurrir
Vuelvo a hundir la mano en la arena
Vuelvo a oler las flores una vez mas
Vuelvo a escuchar, a sentir esa canción
Vuelvo a abrazar pero un poquito mas fuerte
Vuelvo a abrazar pero  un poquito más lento
Vuelvo a cerrar los ojos al besar y vuelvo a besar.





El hombre esta literalmente partido en dos: Él tiene una consciencia de su espléndida identidad única en cuanto a sobresalir de la naturaleza con una imponente majestuosidad, y aún así vuelve al suelo ciega y tontamente para pudrirse y desaparecer para siempre.

Ernest Becker.

sábado, 25 de julio de 2015

26 Página: Cuando llega ese momento


03/01/2010
¿Y tú que quieres ser de mayor?
Esa es la típica pregunta que nos hacen nuestros abuelos, padres, tíos contínuamente desde que somos bien pequeñitos y lo mejor de todo es que cada vez que nos hacen esa dichosa y horrible pregunta cambiamos de respuesta.

Y es que parece que la gente de nuestro alrededor esta deseando llegar el día en el que empiece, realmente, nuestra amarga vida de tomar decisiones.
No, no soy un hombre de tomar decisiones, porque siempre me he encontrado en la situación de escoger lo peor para mi. Realmente no llevo en la sangre esto de tomar decisiones.

Recuerdo la primera vez que tuve que tomar mi propia decisión importante. Mi firma. ¿Cómo iba a ser mi firma del DNI? ¡Íba a tener la misma firma durante 5 años! —Toda una eternidad para un niño que sólo ha vivido 7. Recuerdo que había practicado durante semanas un millón de firmas, y ninguna me convencía del todo. Y al final simplemente fui, escribi: LEÓN R. y lo dejé tal que así.
Algo parecido me pasó cuando me empezaron a dar a elegir Religión y Atención Educativa o la optativa que sea que pongan ahí —Cada año la cambian de nombre. Claro, yo estaba confuso, ni siquiera sabía si creía en Dios, si existía y tampoco sabía que se hacia en las clases aquellas de A.E. Todo el mundo me decía que en esas clases optativas te hacían trabajar mas, otros pocos me decían que solo era ver pelis y resumirlas... La cosa es que yo estaba muy muy confuso, y por miedo a "lo desconocido" me cogí religiosamente, año tras año, la asignatura de religión, valga la redundancia.
A medio año me di cuenta de que efectivamente no creía en Dios, el señor que nos daba clase de religión decía un montón de chorradas sin pies ni cabeza, y lo peor de todo es que nos hacían exámenes de todo aquello... Juan me dijo que en A.E se hacía lo que uno quería, aunque a veces veían pelis y otras veces aprovechaban la hora para hacer deberes atrasados. 
En fin, no soy de tomar decisiones.


Nunca me había coronado tanto como cuando llegó ese momento. El momento en el que debes decidir tu destino, el momento en el que realmente tienes que contestar a la pregunta de ¿Qué quieres ser de mayor? o por lo menos dar parte de la respuesta.
Es el momento en el que vas a pasar de tercero a cuarto de la ESO y te preguntan ¿De letras puras, de sociales o de ciencias? ¡Yo que se, señores, no tengo ni puta idea de que es cada cosa! Ese momento puedes arruinar tu vida por completo, o acabar siendo lo que realmente te gusta, o por lo menos lo que te disgusta menos. Yo fui de esas personas que se equivocó estrepitosamente y encima no tuvo el valor de reconocerlo y "reparar los daños".
Yo me metí a sociales, me metí a sociales por miedo, porque todo el mundo me decía que las ciencias eran muy difíciles, tenías las matemáticas difíciles, que si la física y la química eran horribles, tecnología no era un paseo... Y me dije, bueno, creo que me llaman mas las ciencias, pero escogeré el camino fácil, porque las Sociales tampoco se me daban tan mal al fin y al cabo ¿Y para que probar algo nuevo como la física y la química? Demasiado esfuerzo...
ERROR
ERROR
ERROR
Cuarto de la eso me fue bien, si... Y bachillerato, las pasé un poco putas, pero mis colegas de ciencias lo estaban pasando peor que yo. No se si por la dificultad de la materia o es que simplemente el social se me daba bien. Aunque siempre me quedó el gusanillo de todas las movidas de las que hablaban, la energía electromagnética y un montón de palabrejas y conceptos extraños que intentaban explicarme. La física realmente me llamaba, pero estaba mas cómodo en mi pequeña zona de confort. ¿Y para qué cambiar? Y sobre todo no quería darle la razón ni a mis padres ingenieros cabezones, que casi me obligan a punta de pistola a cogerme ciencias.

¿Que cómo he acabado? Pues creía que bien, pero no. Creía que me gustaba la Psicología, creía que me gustaba escribir, pero no.
A ver, si que me gusta la psicología, pero estudiarla es realmente un rollo, porque en el fondo, fondo, no puedo entender nada de lo que ocurre, simplemente lo tengo que memorizar y soltar como un papagallo para luego, al año que viene olvidarme. Quería ser escritor, pero no me llena escribir por obligación, tener que producir y producir para que luego no te valore absolutamente nadie, porque realmente tu trabajo no es bueno, porque no lo haces por gusto.

Lo que quiero decir, es que me arrepiento de no haber probado las ciencias, de no haber probado el quemar cerebro, el poner toda la carne en el asador y darlo todo de mí. Esforzarme mas. Porque quizá eso era lo mio, o quizá no, no lo sé.

Solo sé que no voy a rectificar, no voy a rectificar por darles esa satisfacción.



15/08/2027
Noticias de última hora:
Hallado muerto un hombre a los 36 años de 
edad en el sofá de su casa presuntamente 
ahogado por un pequeño papel manuscrito que
obstruía sus vías respiratorias.

"F=m·g" 

viernes, 10 de julio de 2015

¿Que has leído? —¡He leído a Kant!


¿Qué mejor forma hay para empezar una entrada de tales características que con un chiste malo?

A ver, que yo no tengo nada contra Kant, era un hombre muy... bueno, guapo no era, pero hay que respetarlo porque escribió cosas que a mi me parecen realmente aburridas y soporíferas interesantes.

En fin, solo quería introducir la nueva sección que encontrareis en mi bloc de notas personal. Se encuentra justo debajo de la cabecera, al lado de "puntos y aparte".
Esta sección se va a dedicar, como ya expliqué en un post anterior, a la "disección" de los libros que voy a ir leyendo, espero que para mañana pueda tener el primer libro diseccionado. He buscado un bastante sencillo para empezar, porque como con el mondongo, las primeras salchichas siempre salen un poco raras...
El primer libros será uno de Robert Louis Stevenson: El diablo en la Botella. No es tan famoso como el de la Isla del Tesoro que casi todos nos hemos leído cuando éramos pequeños, pero esta muy bien, bueno bueno, ¡Que me adelanto al post! 

Mañana sabréis más sobre él 

Un punto y aparte: El olor a infancia.

El martes pasado hizo un calor agonizante, y al volver de la compra decidí alargar el trayecto un poco para pasarme por el casco viejo del pueblo, donde las casas antiguas proporcionan un aire acondicionado natural estupendo.

Me dirigí hacia la calle de mi bisabuela Concha, porque ya que iba a dar un rodeo aprovechaba y veía la antigua casa de la familia que se decidió vender.
La puerta principal medía dos metros y medio de alto y dos de ancho, era antigua (ya entonces) de madera, de un color pastel azul cielo y tenía "tachuelas" metálicas ya un poco oxidadas. A los lados tenía dos majestuosas parras plantadas en macetas en el suelo que se elevaban por toda la fachada, pintada de blanco. En el balcón casi puedo decir que tenía un precioso jardín en cuyas esquinas había otras dos parras pequeñitas que rodeaban el borde exterior del balcón y cuyas ramas, finalmente caían para intentar besarnos la cabecita al pasar a través de la puerta.

Esa fachada personificaba a mi abuela, estaba en armonía con la naturaleza, era bella y transmitía una sensación de paz bastante increíble.
 Lo más imponente de aquella caserona no era su fachada, aunque en tiempos hasta se había premiado y se había halagado por su increíble encanto, tampoco lo eran sus habitaciones, cuidadosamente decoradas e impolutas ni lo era el salón principal, casi tan grande como la casa en la que vivo en Zaragoza. Lo más imponente era el cómo la fragancia del lugar conseguía escenificar los hechos que ocurrieron allí en el pasado. Ese típico "olor a libro viejo" que en cada estancia en la que entraba cambiaba un poquito y contaba su propia historia.
En fin, no os voy a marear mas
Solo quería reflejar lo bonito que es recordar por un olor, y lo bonito que es que esa calle huela como siempre, como si no hubiera pasado ni un solo minuto.
Mi pueblo quizá no sea bonito, pero el casco viejo es precioso y lo mejor de todo es que  huele a amor, huele a infancia, huele a buenos tiempos, huele a que no falte nadie, huele a...


martes, 23 de junio de 2015

Un punto y aparte: Estoy de vuelta.

Hola Bloceros!

Sí, estáis leyendo bien, estoy de vuelta ¿?
He estado ausente durante un largo y agonizante periodo y os juro que no lo he hecho por voluntad propia.
Sí señor, la carrera es la culpable de todas mis desgracias, además de freírme los sesos me absorbe de todo el tiempo del que dispongo y de hecho, ni si quiera encuentro el momento para leer. Y cuando lo encuentro sólo me apetece morirme en mi cama.

En fin, no tengo vida ni social ni amorosa  como "buena" pseudo-matemática que soy.

Así que para compensar todo esto, me voy a poner algunos retos este verano que yo creo que seguro que voy a cumplir. Bueno, es muy probable que no los cumpla... pero lo voy a intentar ._.''
Para empezar voy a publicar cada semana algún relatito mío o un pensamiento o algún punto y a parte. Y además, para obligarme a seguir la rutina de lectura, voy a intentar hacer unas tarjetitas, o como yo los llamo "resumarios" de los libros que voy leyendo con las partes más importantes de la lectura respecto al argumento, el estilo y todas esas cosillas que, si nos fijamos, pueden ayudar a mejorar nuestra redacción.

Y bueno, tengo otro plan para este verano, y es conseguir presentarme a un concurso literario que organiza una universidad de por aquí, lo tengo que mirar aún. Y por ello, os quiero pedir el pequeñísimo favor de que me aportéis alguna idea para escribir (para escribir publicaciones en el blog, la idea del relato que concursa ya la tengo :D ), porque chicos, ahora mismo mi cerebro está mas seco que un bizcocho que ha pasado tres días al sol en Zaragoza.
Así, si vosotros queréis que escriba sobre algo en cuestión como un sueño, un sentimiento, alguna situación complicada en la que esteis, alguna idea alocada como la de un gorila gigante que emerge desde el fondo del océano pacífico y destruye Tokyo. Calla, que eso es una mezcla de King Kong y Godzilla...

Ayudad a esta pobre matemática loca a publicar alguna entrada. Si tenéis nombre de usuario pondré vuestro nombre en  el principio del relato!

domingo, 7 de septiembre de 2014

25ª Página: Desesperation is not an option.

Aquí estoy de nuevo mis queridos bloceros, otra vez en plenos exámenes y sin una gota de imaginación pero esta vez estoy aquí como mensajera de energía y fuerza para todos aquellos que se estén desanimando con los exámenes de septiembre.

Yo también soy una de las personas que se ha tirado currando todo el verano, sacando dinero de hasta debajo de las piedras y estudiando como si no hubiera mañana para poder superar todas las asignaturas que ha suspendido en junio. Pero aqui viene lo peor, creo que no voy a poder recuperarlas, a pesar de que me he esforzado y trabajado mucho este verano.

¿Qué pasa? ¿Cuál es el problema? 
Que yo estudio una carrera de ciencias jodida, matemáticas, y para añadirle emoción y dificultad es mi primer año, es todo muy confuso y nada se parece a lo que he visto en toda mi vida. Y sí, realmente en esta carrera se habla en otro idioma.
Pero para mí, que sea difícil no es una escusa como para suspender nada. No me parece motivo suficiente para fracasar (sí, no me gusta nada perder). Pero cuando eres así, ¿qué ocurre en tu mente cuando te presentas a un examen habiendo estudiado mucho y apenas puedas contestar? Pues en mi caso, me explotó y se convirtió en chocapic—es bromi, pero estuvo a punto de darme un derrame o algo.
Y es que después de pasarte todo el verano estudiando esa asignatura y de estar más de cinco horas en ese examen , salir sabiendo que has suspendido es realmente desesperanzador. Reconozco que en el momento me derrumbé muchísimo, porque había invertido todo el verano en prepararme esa asignatura, dejando de lado la que aún me queda por presentarme. De hecho casi decido dejar la otra asignatura y no estudiarla estos seis dias que me quedaban.
¿Pero sabéis qué? 
La desesperación en estas carreras NO es en absoluto una opción, los exámenes son una lotería en las que a veces se gana y otras se pierde. Puede que en un examen llevándolo genial suspendas pero es así. Son así las carreras de ciencias. Lo importante para llegar a ser algo en esta vida es ser constante y no rendirse jamás. Así que para todos aquellos que lo están pasando mal estos exámenes: 
¡Desesperation is not an option! ¡Stay strong!


miércoles, 30 de abril de 2014

24ª Página: Desvaríos y reflexiones varias.

"Para no sumirnos en la monotonía, hoy que tengo sueño —aunque no puedo dormir — voy a hacer un poco de escritura automática, aunque más que automática va a ser psicóticamente aleatoria pues quien se adentre en el texto aquí presente puede que acabe como una servidora ". Melanctha.
Nota: Como esto es una entrada sin importancia, que no tiene ningún valor literario (aunque nada de este blog lo tiene) voy a hacer que ocupe menos espacio. La entrada continúa, si quieres seguir leyendo este truño, adelante, haz click en "Más información"